A finales de los años 80, Avid Technology desarrolla la edición digital no lineal, con el sistema Avid Media Composer, que revoluciona el proceso de postproducción de la industria cinematográfica.
A pesar de haber sido una de las aplicaciones para edición de vídeo más utilizadas por los profesionales del cine, Avid Media Composer ha ido perdiendo en los últimos años una importante cuota de mercado.
Según BetaBoston.com, Avid Technology, redujo en 2015 su volumen de trabajo con el objetivo de ahorrar cerca de 70 millones de dólares.
La democratización que ha permitido la edición digital, abrió nuevas posibilidades con la aparición de aplicaciones como Final Cut Pro y Adobe Premiere Pro, que rápidamente consiguieron posicionarse entre los editores nóveles y con menor presupuesto. Ante este nuevo paradigma nos preguntamos si las futuras actualizaciones de Avid Media Composer le permitirán recuperar el terreno perdido en el mundo del audiovisual, o si terminará reducido a los profesionales 'de vieja escuela' que aun permanecen afines a la marca.
Por otro lado, también ha habido una tendencia hacia la utilización de plataformas en línea y servicios en la nube para la edición y postproducción de vídeos, lo cual ha dejado a Avid Media Composer en desventaja frente a estas nuevas opciones. Además, hay una mayor demanda por parte de los usuarios de herramientas más intuitivas y fáciles de usar, lo cual ha sido un reto para Avid en cuanto a adaptarse a estas nuevas necesidades.
Es cierto que Avid Media Composer todavía cuenta con una base de usuarios leales y apasionados, que aprecian su calidad y capacidad de personalización. Sin embargo, la competencia sigue en constante evolución y es difícil predecir si Avid será capaz de mantenerse a la altura de las nuevas tendencias y necesidades de la industria audiovisual. Lo que está claro es que el futuro de Avid Media Composer depende en gran medida de su capacidad para innovar y adaptarse a los cambios del mercado.
