"La televisión desaparecerá en 10 o 20 años", afirmó el fundador de Netflix en el Mobile World Congress. Y los datos le dan la razón: en 2016 el consumo de vídeo desde dispositivos móviles superó por primera vez al consumo desde ordenadores y televisores conectados. ¿Cómo cambiará esto tu forma de ver cine y televisión?

El vídeo en el móvil ha sido una de las tendencias protagonistas del Mobile World Congress 2017 celebrado recientemente en Barcelona. De hecho, el evento ha contado con su propio canal de televisión online para la transmisión en directo de los principales acontecimientos. Y sin duda uno de los momentos estelares de esta cita tecnológica global fue la esperada conferencia ofrecida por Reed Hastings, cofundador y CEO de la plataforma de vídeo online Netflix. Durante su ponencia, Hastings afirmó que "en los próximos 10 a 20 años, todo el vídeo que consumimos actualmente en la televisión pasará a Internet". Además, añadió que la mayor parte de este vídeo se consumirá desde los dispositivos móviles, por lo que Netflix ya está trabajando para facilitar el acceso a sus contenidos en los smartphones y tabletas. ¿Tiene razón o barre para casa?

El futuro es aquí y ahora

Por el momento, parece que los datos están dando la razón a la predicción realizada por este polémico emprendedor que asegura que fundó Netflix solo para vengarse de la desaparecida Blockbuster por haberle multado al devolver tarde una película de vídeo.

De acuerdo con la consultora Zenith, en 2016 el consumo de vídeo en dispositivos móviles superó por primera vez al consumo realizado en ordenadores y televisores conectados. En Estados Unidos, la televisión tradicional ya solo supone el 51 % del consumo televisivo nacional y en España el 47 % de la población consume vídeo a la carta. Otro estudio de AOL señala que el 67% de los usuarios ven vídeos en el móvil cada día, frente al 70 % que lo hacen en un ordenador de sobremesa o portátil.

Aparentemente, no existe duda de que el "sorpasso" del vídeo móvil al ordenador ya se ha producido y que este no tardará mucho en batir también a la televisión. Esto abrirá un escenario totalmente nuevo que transformará por completo nuestra forma de consumir contenidos de cine y televisión. ¿Pero cómo se reflejará todo esto en tu vida diaria?

Prepárate para cambiar de pantalla

La primera consecuencia será que el tamaño de las pantallas de los smartphones y tabletas seguirá incrementándose para disfrutar de más contenidos en alta definición, ultra alta definición, realidad virtual, etc. Para que te hagas una idea, hace una década la mayoría de los teléfonos inteligentes tenían pantallas de 3,5 pulgadas (menos de 10 centímetros); actualmente, casi todos los modelos llevan 5,5 pulgadas (14 centímetros) y este año veremos terminales con pantallas todavía mayores, como el LG 6 (5,7") o el Samsung Galaxy S8 y el iPhone 8 (que llegarán a las 5,8"). Cuando estos móviles ya no nos quepan en el bolsillo, se habla de pantallas desplegables o de proyectores de vídeo.

¿Y qué verás en estas enormes pantallas móviles? La televisión tradicional cederá minutos al vídeo a la carta, los podcasts y el contenido generado por los usuarios. Es decir, seguirás mirando las cadenas de televisión convencionales (aunque cada vez más en el móvil) y series o películas a la carta (mediante plataformas como HBO o Netflix y los servicios ofrecidos por tu operadora). Pero te engancharás progresivamente a los podcasts (programas disponibles en Internet para verlos cuando quieras, a menudo generados por pequeñas productoras de vídeo profesionales independientes) y a los vídeos de los "youtubers", que serán tan populares como las estrellas de la televisión.

Como puedes ver, tendrás acceso a una oferta de contenidos muy variada. Sin embargo, los vídeos cortos serán los más populares, como ya comentamos. La razón resulta fácil de entender: no es lo mismo ver un programa de televisión que dura una hora en el sofá de tu casa que mirarlo en el teléfono cuando vas en el metro de camino al trabajo.

En este sentido, los datos de AOL señalan que uno de cada tres usuarios prefiere ver vídeos de menos de cinco minutos en el móvil. Asimismo, esta preferencia por la brevedad explica porqué cada vez vamos menos al cine y pero vemos más series: no tenemos tiempo para una película de dos horas, pero sí para un capítulo de 40 minutos.

O pagas o miras los anuncios

Y como diría mi madre: ¿esta fiesta quién la paga? Lógicamente, darte un atracón de vídeo en el móvil no será gratis. Por un lado, están las plataformas y servicios de pago, aunque solo uno de cada cinco españoles paga actualmente por un servicio de este tipo.

De modo que la publicidad seguirá teniendo un papel clave, aunque los anuncios de vídeo en el móvil serán menos molestos que ahora (por cierto, mira estas tres ideas de spots de vídeo que sí funcionan). Mientras AOL señala que el 45% de los anunciantes están creando anuncios de vídeo más ligeros que se carguen más rápido, YouTube va aún más lejos y anuncia que en 2018 no aceptará en sus vídeos anuncios de más de 30 segundos que los usuarios no puedan cerrar si no desean verlos. Además, se tratará de anuncios más creativos y emocionales, puedes ver algunos ejemplos en este artículo.

En conclusión, en los próximos años pasarás más tiempo pegado a la pantalla del móvil que a la del televisor, disfrutando de contenidos de vídeo a la carta en lugar de tener que conformarte con la programación de las cadenas. Estos vídeos serán cada vez más cortos y no, no te librarás de la publicidad, aunque no tendrá nada que ver con los interminables cortes publicitarios de la televisión actual. ¡Eso sí que será una mejora!

Roger Garcia | Licenciado en Periodismo
Publicado el 16 de marzo de 2017